Los personajes "del momento" cambian constantemente, pero el espíritu curioso de los niños no, por eso, se nos ocurrió tomar juegos tradicionales como: Rayuela, carrera de embolsados, soga, elástico, competencia de trompo y balero, entre otros y devolvérselos a una generación que quizás no los conoce, logrando así complicidad e intercambio, mediante el juego, entre los abuelos, padres y niños.